Consultar un manual de instrucciones. Juguetear con dos apetecibles paquetitos de aperitivos. Sentirse atraídos por la portada de un libro.
Diseño, artes gráficas y visuales, ¿son palabras que pertenecen a un mundo abstracto y exclusivamente de expertos? ¡Todo lo contrario! Están tan insertadas en nuestra vida diaria que prácticamente no nos damos ni cuenta.
Y abrir las puertas no sólo a los profesionales del sector es el primer objetivo de los Torino Graphic Days, que, tras el éxito de 2016, volverán a animar la Ciudad del Bicerin del 12 al 15 de octubre de 2017 con conferencias, actuaciones, puestos de venta y exposiciones artísticas. Resumiendo, un ir y venir de creativos de la comunicación visual procedentes de Francia, Estados Unidos, Países Bajos, Reino Unido… sin olvidar lo mejorcito de Italia. Habrá nada menos que 8 talleres: desde la serigrafía con uso reducido de tecnología hasta la risografía, la caligrafía con rotuladores de pincel y el rediseño de identidad (toda la información para participar en los talleres y conferencias se encuentra en www.graphicdays.it).
Para quien no lo conozca, el lugar de celebración es un espacio que sin duda merece la pena. Se trata de una antigua fundición de 8000 m2, sede actual del Toolbox Coworking, el cual se inauguró en 2015, alberga más de 130 actividades empresariales diferentes y cuenta con más de 400 miembros entre autónomos y empresas emergentes y de innovación. Este enorme centro compartido de trabajo creativo tiene un atractivo postindustrial muy particular. También cuenta con un animado taller de impresión, el Print Club Torino, uno de los patrocinadores del evento. Pero pasemos a conocer mejor a todo el equipo, acompañados por Fabio Guida, coordinador del Festival.
¿Quién hay detrás de los Torino Graphic Days?
¡Muchísimas personas! El Print Club Torino y la asociación PLUG se encargan de la dirección artística junto con la agencia de comunicación Quattrolinee, mientras que el estudio MG2 Architetture se ocupa de los elementos decorativos de las exposiciones y de todos los espacios en los que se celebra el evento. Entre los patrocinadores, también se encuentra TAL-Try Again Lab, dedicado a la serigrafía.
Con la creación de esta sólida red de profesionales y gracias al gran número de voluntarios, reclutados a través del Politécnico y de la Universidad de Turín, el Instituto Europeo de Diseño y el IAAD (Instituto de Artes Aplicadas y Diseño de Turín), hemos conseguido dar forma a nuestro sueño: celebrar un festival de artes visuales en Italia que esté en línea con los grandes ejemplos europeos, dando cita a los artistas más interesantes del panorama internacional.
¿Qué nombres destacan particularmente?
Este año cobra especial protagonismo la escena neoyorquina: tendremos a Alexander Tochilovsky, comisario del Lubalin Center, y a Greg D’Onofrio y Patricia Belen, fundadores de «Display, Graphic Design Collection», una plataforma, muy conocida en el sector, dedicada a la investigación de la historia del diseño gráfico en el siglo XX. También destaca la presencia de Ruedi Baur, diseñador gráfico francés con un enfoque innovador en materia de diseño de espacios, y de Massimo Pitis, director artístico de Wired Italia.
En muchos proyectos no sólo han participado instituciones y espacios culturales, sino también escuelas y ciudadanos.
El programa de acercamiento In The City, puesto en marcha en septiembre a través de encuentros y exposiciones, es la gran novedad de esta segunda edición. Queríamos fomentar la participación activa del público para que se viera que el diseño gráfico no es un concepto nicho, sino un ámbito que todos vivimos: desde los rótulos de la ciudad hasta el prospecto de un medicamento, estamos rodeados a diario de mensajes que forman parte del sistema de comunicación visual.
Los puestos de venta servirán de escaparate a los artesanos del diseño y las artes gráficas. ¿Qué momento atraviesa la autoproducción italiana en este sector?
Actualmente se están produciendo muchas experiencias de gran valor. La investigación y la atención a los detalles están volviendo a conseguir una cuota de mercado importante, al valorarse más el carácter único y artesanal de los productos, gracias también al proceso de «educación» promovido por entidades como la nuestra. Además, Torino Graphic Days nace con el objetivo de crear redes entre profesionales, estudiantes y meros curiosos, impulsando de este modo nuevas vías de experimentación.
¿Fluye el diálogo entre el diseño y las empresas italianas?
Las empresas cada vez prestan más atención a la investigación del proyecto: las que tienen una visión actual y un enfoque internacional recurren, progresivamente, a profesionales del diseño para reforzar su imagen. Saben que deben conseguir destacar entre la saturación de mensajes visuales característica de nuestra época: la competición depende ahora de la fuerza comunicativa de las imágenes.
¿Nos anticipa algún otro aspecto destacado?
Bueno, podríamos decir que será una exposición antológica, dedicada a una figura célebre del diseño gráfico italiano, y con muestras especiales de arte visual… aunque también habrá varias iniciativas en las que participarán los visitantes, pero ¡esas no las vamos a desvelar!