Tipos de mascarillas: quirúrgicas, FFP1, FFP2, FFP3. Diferencias entre cada tipo

Ya lo hemos entendido: deberemos acostumbrarnos a llevar las mascarillas de protección durante el futuro próximo. Por este motivo, es útil empezar a conocer los distintos tipos de mascarillas disponibles en el mercado para orientarse correctamente a la hora de comprarlas.

Acerca del tema de las «mascarillas» y su utilidad hay ahora mismo un intenso debate. El ECDC (Centro Europeo para la Prevención y el Control de las Enfermedades) ha publicado recientemente un estudio sobre la eficacia del uso colectivo de las mascarillas para limitar la difusión de la COVID-19. Su uso está siendo cada vez más promovido (o impuesto) por distintos Estados del mundo y, por este motivo, conviene conocer qué mascarillas están disponibles en los comercios y por qué características se diferencian entre sí.

Además, hay que tener en cuenta el hecho de que nos encontramos en un momento en el que es difícil encontrar cualquier tipo de mascarilla, no solo la FFP2 o la FFP3. Por tanto, mejor saber qué estamos comprando y de qué manera puede ayudarnos a protegernos a nosotros mismos y a los demás.

Mascarilla FFP3 y demás: características de los distintos tipos de mascarillas en el mercado

Aquí encontrarás una panorámica sintética de las mascarillas disponibles en el mercado: en ella hablamos de la mascarilla FFP3 o de la más común FFP2, pero también de la mascarilla quirúrgica y de las mascarillas de tela para uso no sanitario.

Actualmente, en el mercado existen distintos tipos de mascarillas:

1. Mascarillas higiénicas de tela para uso no sanitario
2. Mascarillas quirúrgicas
3. Mascarillas EPI (mascarillas FFP1, FFP2, FFP3)
4. Mascarillas N95 y KN95 (parecidas a las FFP2)
5. Mascarillas filtrantes

Veamos juntos sus características principales.

1.Mascarillas higiénicas de tela para uso no sanitario: lavables y reutilizables, contra el despilfarro

Son mascarillas sencillas producidas para uso higiénico no sanitario y no están certificadas. En un momento de gran demanda y escasa oferta de mascarillas, son muchas las empresas que han reconvertido sus líneas de producción para comercializar mascarillas para uso higiénico. Esto se debe a que es importante protegerse y usar en todo caso una barrera de tela que permita respirar fácilmente e impedir la propagación de las gotitas potencialmente contagiosas. Estas mascarillas deben cubrir completamente la nariz y la boca y deben usarse, como todas las demás mascarillas excepto las DPI, manteniendo la distancia de seguridad de al menos un metro respecto a las demás personas. Se trata de mascarillas lavables y reutilizables, útiles para salir de casa cumpliendo todos los requisitos higiénicos de prevención indicados por la Organización Mundial de la Salud.

Por tanto, aunque no sean un dispositivo médico, también ayudan a combatir la propagación del virus gracias a su función de filtro del grueso de gotitas expulsadas por la boca y la nariz. Cada vez hay más países (incluidos EE. UU. y el Reino Unido) que instan a los ciudadanos a llevar cualquier tipo de mascarilla, incluso casera, para intentar limitar la difusión del contagio. Para la reapertura gradual de las actividades comerciales (la llamada Fase 2), también Italia prevé el uso de mascarillas «de tela». Por tanto, las mascarillas de tela para uso no sanitario son una forma de protección colectiva, gracias a su bajo coste y su función de barrera mecánica frente a la propagación del virus. Además, ayudan a reducir la enorme producción de residuos por eliminar asociada al uso masivo de mascarillas de usar y tirar y de guantes.

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2.Mascarillas quirúrgicas: buenas para proteger del contagio a las personas que se encuentran cerca

Las mascarillas quirúrgicas se encuentran entre las más difundidas y usadas durante la epidemia de COVID-19. Son las mascarillas con el típico color azul claro y, habitualmente, eran usadas por médicos y dentistas. La finalidad de la mascarilla quirúrgica es proteger al paciente operado de posibles contactos con bacterias y virus exhalados por el usuario de la mascarilla. Su ventaja está en la capacidad de filtrar muy bien el aire que sale de la nariz y la boca. Poseen una capacidad de filtrado hacia el exterior muy elevada, del 95 %. Por este motivo, se consideran un buen método para limitar considerablemente la difusión de las gotitas de saliva (en inglés, «droplets») que se propagan al hablar, toser o estornudar.

También se conocen como «mascarillas altruistas»: y es que, efectivamente, aunque por una parte filtren eficazmente el flujo de aire que sale de las personas que las llevan puestas, no son igual de eficaces para filtrar el aire respirado entrante. Por tanto, se consideran un excelente método para impedir la propagación del virus en el aire, pero no un método de protección eficaz contra el virus. Por tanto, las personas que las usen en lugares públicos deberán mantener siempre la distancia de al menos 1 metro respecto a las demás personas. Para ser eficaces, las mascarillas quirúrgicas deben cubrir bien y de manera constante la nariz y la boca. Son mascarillas de usar y tirar, por lo que, una vez humedecidas, tras unas 4 horas de uso, deberán desecharse.

3.Mascarillas FFP3 y FFP2: equipos filtrantes de protección individual contra el coronavirus

Las usa el personal médico en hospitales. Son mascarillas consideradas legalmente como EPI (equipos de protección individual) y, por este motivo, garantizan una capacidad de filtrado del aire inspirado y espirado muy superior. La sigla FFP significa «filtrantes faciales de protección individual» (filtering face pieces) e indica que la mascarilla ha sido fabricada de acuerdo con la norma UNE-EN 149-2001 que fija los requisitos de eficiencia, transpirabilidad y estabilidad de la estructura, así como de las pruebas técnicas de biocompatibilidad y el rendimiento de las mascarillas. La numeración progresiva (FFP1, FPP2, FFP3) indica la capacidad progresiva de filtrado del aire de los distintos tipos de dispositivo. Las mascarillas FFP1 tienen una capacidad filtrante limitada, solo retienen las partículas más grandes que hay en el aire respirado y no son las más adecuadas para proteger a quienes las llevan frente a micropartículas perjudiciales como las que contienen el virus. En cambio, las mascarillas FFP2 y FPP3 tienen una capacidad filtrante de partículas minúsculas (incluidas las que contienen el virus) equivalente, respectivamente, al 92 % en el caso de las FPP2 y al 98 % en el caso de las FFP3.

Las mascarillas más eficaces para protegerse a uno mismo y a los demás son las mascarillas FFP2 y las mascarillas FFP3 sin válvula, dado que garantizan la máxima protección tanto para quienes las llevan puestas como para quienes están cerca de ellos. De hecho, la válvula expulsa el aire espirado por quien lleva la máscara, pero sin filtrarlo. Por tanto, su uso está desaconsejado, sobre todo si tenemos síntomas o si sospechamos que podemos contagiar a otras personas. Una particularidad de las mascarillas FFP3 es que, dado el elevado nivel de filtrado y la estratificación de los materiales utilizados para fabricarlas, pueden resultar incómodas para respirar durante periodos prolongados. También en el caso de estas mascarillas, su ciclo de uso es limitado: están fabricadas para garantizar protección durante unas 6 horas, tras lo cual su eficacia filtrante deja de estar garantizada y hay que desecharlas.

4.Mascarillas N95 y KN95: parecidas a las FFP2, alta protección frente al virus para personal médico

Las siglas N95 y KN95 se aplican a las mascarillas producidas y certificadas en China (KN95) y en EE. UU. (N95) de acuerdo con normas de calidad similares a las que certifican las mascarillas FFP2 europeas, pero no idénticas. A este respecto, hay que hacer una aclaración: para que la eficacia de las mascarillas con estas siglas puede considerarse oficialmente equiparable a las FFP2, es necesario que lleven el marcado CE. Esto significa que la eficacia de la mascarilla ha sido sometida a pruebas y que ha sido considerada conforme con las normas adoptadas en la Unión Europea. Si las mascarillas N95 y KN95 llevan el marcado CE, su eficacia respecto al filtrado de micropartículas y de virus será equiparable a la eficacia de las mascarillas FFP2.

A falta del marcado CE, asegúrate en todo caso de que se indique la referencia a la normativa que certifique las características que deba tener la mascarilla de acuerdo con las disposiciones legales.

5.Mascarillas filtrantes: alta protección, reutilizables y ecológicas

Además de los tipos clásicos de mascarilla que hemos descrito, hay un nuevo tipo de mascarilla que se comercializa desde hace poco: la mascarilla filtrante. Se trata de una mascarilla de tela diseñada expresamente para combinar comodidad y una alta capacidad filtrante. La máscarilla con filtro utiliza una tecnología avanzada: está construida con un filtro de nanofibras integrado, garantizando una capacidad de filtrado del 90% de las bacterias dañinas y partículas finas. La mascarilla filtrante forma una barrera mecánica avanzada contra las micropartículas, para proteger a quienes las llevan y a las personas que se encuentran a su alrededor.

La máscarilla con filtro puede lavarse fácilmente a máquina a una temperatura de 60 grados y es estéticamente agradable a la vista, ya que está decorada por fuera con diferentes patrones y motivos. Es un dispositivo que ofrece protección, ecológico y que cuida el diseño. Un producto que puede reutilizarse constantemente y que permite concentrarse en las actividades que se estén realizando de forma segura, limitando la producción constante de residuos que genera el uso masivo de mascarillas y guantes de usar y tirar.

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6.Máscarillas de verano: ligeras y hechas de tela filtrante de triple capa

Con la llegada del calor, las máscarillas tradicionales pueden ser molestas cuando se usan. Por esta razón, también puede encontrar en el mercado máscarillass de filtro más ligeras, hechas de tela de varias capas, para protegerse eficazmente a sí mismo y a los que le rodean de las infecciones. Con la llegada del verano, Pixartprinting ha lanzado las máscarillas Triple Capa Pro. Estas máscarillas son más livianas, tienen elásticos ajustables para un mejor ajuste y comodidad y tienen una capacidad de filtrado de micropartículas certificada de más del 90%. Estas máscarillas aprovechan la capacidad de las nanofibras en una de las tres capas de tejido que bloquean las micropartículas dañinas.

La máscara se puede lavar a máquina a 60 grados en agua caliente y es fácilmente reutilizable. Además, como las máscaras antivirus se han convertido en una herramienta esencial, también se ocupan de la estética. Hay más de 150 motivos y decoraciones que puedes elegir para aplicar a tu máscara Pro Triple Capa. Además, también puede personalizarlo con su logotipo o un diseño de su elección a partir de una sola copia. La solución colorida, reutilizable y altamente filtrable para protegerse cómodamente incluso en verano. Puedes encontrarlos aquí.