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14La impresión es un arte.
Y no hace falta que recurramos a los famosos grabados de Rembrandt que ayudaron a convertirlo en un artista rico y acomodado, además de en un verdadero emprendedor de éxito en la época. Las confluencias entre la creatividad, el arte y el emprendimiento a veces se dan de casualidad y nos llevan a unos resultados increíbles.
Este es precisamente el caso de Marjolen Verstappen, una joven diseñadora gráfica y pintora que, gracias a nuestros servicios de impresión online, ha creado una tarjeta de visita cuadrada sin parangón.
No solo su forma es poco usual e ideal para llamar la atención a primera vista. Es que, en este caso, la tarjeta de visita va mucho más allá: es una ventana abierta al mundo artístico de la pintora, es un medio de contacto privilegiado y, al mismo tiempo, un «portafolio» concentrado que nos hace pensar inmediatamente en sus habilidades pictóricas y en el estilo de sus lienzos.
Su pasión por el arte y la pintura, así como el deseo de expresarse y de darse a conocer en su ciudad, y luego, en el mundo, fueron los principales motivos que llevaron a Marjolen a crear una tarjeta de visita totalmente inolvidable. Es una verdadera obra de arte en miniatura y seguro que los visitantes de su exposición no son capaces de dejar de mirarla ni de olvidarla. El resultado final es un objeto pequeño, pero con un potencial enorme. Es una especie de puente que lleva a los visitantes a experimentar las sensaciones que tuvieron delante de un cuadro y que podrán evocar con tan solo un vistazo.
Hoy os presentamos a Marjolen, sus pasiones y su inventiva.
Dejaos intrigar por su inventiva, por su pasión sincera y por sus obras de arte.
Estamos seguros de que las recordaréis: ¡desde la más grande a la más pequeña!
Que lo disfrutéis.
¿Quién eres? Cuéntanos quién eres y a qué te dedicas. ¿Cuáles son tus sueños, aspiraciones y aptitudes? ¡Haznos un retrato conciso, pero fiel!
¡Hola! Soy artista, diseñadora gráfica y vivo en Eindhoven, Holanda. ¡Me encanta ser creativa! Trabajo como diseñadora gráfica autónoma desde algunos años ya. Además, desde hace dos años, también me estoy dedicando a mi propia producción artística profesional. Pintar es lo que más me gusta del mundo. Cuando miro un lienzo en blanco, inmediatamente se me empiezan a pasar por la cabeza posibles combinaciones de colores, formas y técnicas que puedo usar. Esto es lo que de verdad me da la vida.
Ahora mismo, tengo obras expuestas en algunas exposiciones de Holanda, pero mi sueño es poder exponer fuera de mi país. Obviamente, también me gustaría venderlas y poder ver que la gente está satisfecha y feliz cuando las mira.
¿Puedes explicar a nuestros lectores qué has creado con nuestros servicios de impresión?
Creé unas tarjetas de visita cuadradas que representan un detalle concreto de uno de mis cuadros.
Volvamos a los orígenes. ¿Cómo surgió la idea que te llevó a realizar este producto? ¿Tiene una historia particular?
La verdad es que todo fue muy simple. Tenía pensado hacer mis tarjetas de visita personalizadas en formato cuadrado. Creo que es un formato muy particular y que se distingue con facilidad de las tarjetas de visita tradicionales, que son rectangulares. Así pues, busqué una empresa de impresión que ofreciese este formato de tarjeta de visita en particular y encontré a Pixartprinting.
Una vez que diste con la idea adecuada, te fijaste una meta a alcanzar. ¿Qué querías conseguir con tu idea? ¿Cuál era tu objetivo?
Lo que necesitaba estaba claro: unas tarjetas de visita que tuviesen mis datos de contacto. Tenía que poder dárselas a los interesados que fueran a la galería de arte en la que estuviesen mis obras. Para mí, es importante que se acuerden de mí y que puedan encontrarme con facilidad online para poder ver mi portafolio o mi perfil de Instagram. Necesitaba una tarjeta de visita inconfundible, que consiguiesen que los visitantes recordasen mis obras al instante cuando llegasen a casa.
¿Cómo diste vida a tu proyecto? ¿En cuántas fases dividiste tu trabajo y cuáles fueron esas fases? Cuéntanos el proceso con el que diste forma a tu idea para tenerla lista para trabajar sobre ella e imprimirla.
Aprovechando mi experiencia como diseñadora gráfica, diseñé yo misma la imagen de mi tarjeta de visita. Para ello, utilicé un detalle de uno de mis cuadros que se expondría seguramente en la exposición.
¿Cómo aprovechaste la impresión a la carta para terminar tu proyecto? ¿Qué materiales elegiste y por qué?
El proceso me resultó supersencillo y rápido. Utilicé InDesign para hacer el diseño de la tarjeta de visita, subí el archivo PDF a vuestra página web y ya el resto fue esperar a que llegasen a mi casa. ¡Facilísimo!
¡Ahora toca aprovechar al máximo los productos impresos! En tu caso, las tarjetas de visita cuadradas. ¿Qué sentiste al verlas lista para poder intercambiarlas?
¡Verlas en mis manos fue una satisfacción enorme! Me encantó la forma que tenían y la calidad de la imagen. El resultado fue exactamente el que quería.
¡Esto no es más que el principio! ¿Qué otros proyectos tienes en mente para más adelante? ¿Podrías revelarnos algo?
Por suerte, siempre se me ocurren un montón de ideas. De momento, estoy pensando en diseñar otras tarjetas de visita e impresiones artísticas con representaciones de algunas de mis obras para poder venderlas online.