Si hay alguien que sabe sobre tipografía en el mundo de habla hispana, ese es José Ramón Penela. Es diseñador gráfico, tipógrafo, investigador y cofundador de la web Unos Tipos Duros, una verdadera referencia para todo diseñador que quiera estar al corriente de ese apasionante mundo que es la tipografía. Asimismo, ha escrito sobre tipografía, su historia y su aplicación en publicaciones como Étapes, Visual, Iconográphic y Gràffica, y es colaborador habitual con editoriales como Gustavo Gili y Taschen. Si a todo ello añadimos que es miembro del Comité Científico del Congreso Internacional de Tipografía en España y de la Printing Historical Society, podemos afirmar sin complejo que es una verdadera eminencia. Hoy hablamos con José Ramón sobre letterpress, el valor de la tipografía y el papel que desarrolla en la sociedad actualmente y, por supuesto, de su entusiasmo por los caracteres.
José Ramón Penela es un tipo duro e inquieto, de los que no para un segundo. De hecho, en el momento de responder a nuestras preguntas, está en Santo Domingo, donde participa como ponente en el evento SantoTipo. Su relación con la tipografía hace años que nació a raíz de cursar un Master de diseño editorial por motivos profesionales. «Pronto me encontré con una herramienta fascinante, más aún en esos años, en torno al año 2000, cuando apenas había contenidos sobre tipografía en castellano en la red», nos explica. «Pasión e interés me llevaron a crear Unos Tipos Duros».
Desde entonces hasta hoy, este pequeño proyecto que era más un medio de expresión personal y limitado en contenidos, se fue convirtiendo en un conjunto de recursos puestos a disposición tanto de la comunidad educativa como de todos aquellos interesados de manera profesional o personal en la tipografía. Y ahora, Unos Tipos Duros (UTD) es la gran fuente de información y formación tipográfica en el ámbito hispano. Algo que en aquel momento no podía imaginar.
José Ramón Penela se encarga junto con Pep Patau (socio y cofundador en esta aventura que es UTD) de la edición de los principales contenidos de la web y de responder a las preguntas de los lectores (que no son pocas).
Una de las preocupaciones de muchos diseñadores es que su trabajo no está lo suficientemente valorado. Nos preguntamos cómo la tipografía, como disciplina anexa al diseño, se ve afectada y le lanzamos la pregunta a nuestro experto. ¿Necesita la tipografía reivindicarse como disciplina y hacerse a su vez un hueco en el mundo del diseño? Su visión es clara: «No creo. La tipografía sin diseño es solo formas». Y añade: «Es una parte imprescindible de la comunicación». Otra cuestión distinta es qué sucede con el público en general; hasta qué punto la gente de a pie es consciente de cómo la tipografía impregna los diferentes aspectos de sus vidas. En este sentido, para Penela, «la gente es consciente de que las letras transmiten conceptos e ideas y a su vez son parte del paisaje habitual. Pero posiblemente, la mayoría no se pare a reflexionar sobre la adecuación de la tipografía al mensaje, ya que la saturación es enorme».
Ello no quita que en la actualidad asistamos a un boom tipográfico que se mueve entre dos mundos aparentemente antagónicos. Por un lado, la tipografía digital, que abre infinitas posibilidades. Por otro, vemos una necesidad de recuperar o poner en valor las técnicas más artesanales, el letterpress y los tipos de plomo. Según nos comenta J.R. Penela la convivencia entre ambos mundos se produce de una manera natural, sin colisión, ya que «se trata de dos fenómenos paralelos», afirma. En este punto aclara: «El retorno del letterpress tiene que ver con una tendencia generalizada a mirar al pasado, a la naturaleza, intentando recuperar una relación diferente con nuestro entorno. También hay que comentar que cuando una tecnología deviene obsoleta se convierte en una artesanía y eso es lo que ha pasado con el letterpress, que se ha convertido en un medio de expresión artística».
En cuanto a la tipografía digital y las nuevas posibilidades que abre, hace unos meses conocimos el caso de IBM, que ahorrará 1 millón de dólares al año con el desarrollo de su nueva tipografía, IBM Plex. Nuestra duda es, estos aspectos como son la economía de recursos o la ética en el diseño de una fuente, ¿son cuestiones habituales que se hacen los diseñadores de tipos? ¿O más bien suele primar el aspecto estético? Para Penela no hay duda: «Un buen diseñador tipográfico debe tener en cuenta todas las variables del proyecto de un diseño de una tipografía. Aquí estamos hablando tanto de requisitos técnicos como estéticos o formales. En algunos casos unos tendrán más peso que otros claro está. Creo que la responsabilidad y la ética, como en todo proyecto de creación y comunicación, son una parte que también debemos valorar».
Por otro lado, hay grandes compañías (IBM, Samsung…) que han apostado por tener una tipografía corporativa propia. «Una tipografía es una parte importante de la identidad corporativa de una empresa. En este sentido, disponer de una voz propia y exclusiva es una buena inversión para cualquier compañía», nos explica. «Por esto creo que es una buena idea disponer de una tipografía propia. Ahora, si hablamos de una compañía pequeña, creo que debemos poner sobre la mesa las expectativas que tenemos».
En breves minutos José Ramón Penela inicia un acto en el Centro Cultural de Santo Domingo dentro de la Semana Tipográfica SantoTipo. Cerramos la entrevista con ganas de hacerle más preguntas. Todo aquel que esté interesado en disfrutar de su pasión por la tipografía, la historia y su aplicación le recomendamos que siga la web: Unos Tipos Duros.