Table of Contents
En 1970, en plena crisis internacional debido a la guerra de Vietnam, el prestigioso politólogo estadounidense Samuel Phillips Huntington —de pensamiento neoconservador— fundó —junto a su socio Warren Demian Manshel— la que se convertiría en una de las revistas de política exterior y relaciones internacionales más importantes de Occidente: Foreign Policy.
Foreign Policy, publicada originalmente por la fundación Carnegie Endowment for International Peace (uno de los muchos proyectos filantrópicos del célebre empresario Dale Carnegie), se consolidó rápidamente como una de las revistas más importantes del sector, capaz de influir en el debate político estadounidense e internacional.
Al principio, las publicaciones eran trimestrales, hasta que pasaron después a ser bimensuales en la última década. Foreign Policy es una revista profundamente estadounidense pero difundida en todo el mundo.
Es una de esas revistas que se envían y nunca ha necesitado visibilidad en los quioscos, también porque los fundadores y comentaristas involucrados siempre han dado a los lectores una garantía de gran credibilidad. Además, se espera con impaciencia su número especial dedicado a los «100 global thinkers» del año para saber qué personalidades han sido incluidas en la clasificación.
La tirada de FP siempre ha rondado los cien mil ejemplares, lejos, por tanto, de las publicaciones más famosas, pero se ha labrado un sólido nicho de lectores importantes.
La eficacia de los contenidos
Las revistas sobre política no destacan generalmente en términos de innovación gráfica o visual. Foreign Policy no fue una excepción en sus primeros cuarenta años de vida, apoyándose en un diseño interior muy simple, con división en dos o tres columnas, fotografías bien visibles al inicio del artículo dominadas por títulos muy grandes, titulares pequeños y encabezados en los márgenes de la página para dar orden.
Las tipografías utilizadas son Serif muy clásicas, como Caslon y Big Caslon, que permiten una excelente legibilidad y ofrecen cierta elegancia al diseño.
La peculiaridad estaba en un formato estrecho y largo que tenía el índice en la portada. Con el paso de los años, el formato se volvió más clásico, con la foto de portada enmarcada en un fondo blanco.
Portadas eficaces e inteligentes
Como ocurre en otras revistas internacionales que hablan de economía o política, la portada se caracteriza por el logo/encabezado en la parte superior izquierda, una imagen a página completa muy significativa y títulos con referencias a los contenidos internos en la parte inferior.
Hasta 2001, el encabezado consistía en el título con todas las letras. A partir de ese año, se creó un logo con las iniciales FP en un cuadro de color burdeos, que después se modificó con el proyecto de rediseño de 2014 y pasó a ser un rojo más simple y reconocible, que en ocasiones puede desaparecer y dejar solo las dos letras blancas o negras, dependiendo del color de la imagen subyacente.
Durante treinta años se utilizaron en la portada casi únicamente fotografías, hasta que a partir de la década de 2000 también se empezaron a incluir ilustraciones. En 2014 se dio un paso más con el diseño gráfico de la portada, que se volvió más elaborado para poner énfasis en el lado conceptual y de opinión de la revista, ya que la fotografía siempre nos devuelve a la noticia y a la historia de la realidad.
No es cierto que la política no necesite creatividad
Tras el rediseño, las opciones gráficas se volvieron más atrevidas y la fuente Serif de los textos se combinó con una bonita Sans Serif moderna para los títulos que se encajaban en las columnas, creando dinamismo en las páginas.
En la dirección creativa participan cada vez más ilustradores con estilos poco convencionales y también se utilizan infografías a página completa.
Hasta la fecha, Foreign Policy ha mantenido contenidos relevantes con un diseño gráfico de alto nivel.
Las revistas más prestigiosas sobre política exterior y economía política se resisten al avance de lo digital. Foreign Policy, así como The Economist, son un ejemplo brillante de esto: su sabiduría y autoridad permiten que sus ediciones en papel sobrevivan y obtengan buenos resultados, actualizándose con el uso de infografías, ilustraciones conceptuales, fotoperiodismo y un diseño gráfico más dinámico.
Foreign Policy continúa publicando contenidos autorizados y exclusivos con un diseño gráfico de gran calidad que hace de la revista uno de los ejemplos más eficaces del panorama editorial mundial.
Fuentes de las imágenes:
https://foreignpolicy.com/the-magazine
https://edxjohnson.com/Foreign-Policy-features
https://www.behance.net/valeriopellegrini
https://www.racheljoyprice.com/foreign-policy-mag
https://www.theispot.com/whatsnew/2021/6/dan-bejar-for-foreign-affairs-magazine.htm
http://stuffonpaper.net/tag/foreign-policy/
Las imágenes del artículo pertenecen a sus legítimos propietarios y se utilizan únicamente con fines informativos. Todos los derechos reservados.