Ser fiel a la marca
Una de las primeras cosas que debes tener en cuenta es ser fiel a la marca.
Si se trata de una marca y un producto completamente nuevos, tú y tu cliente tendréis que decidir cuál es el mercado al que os queréis dirigir y cómo atraerlo. ¿El packaging tiene que ser juvenil y moderno o se trata de una marca de lujo?
Si, por el contrario, la marca ya existe, necesitarás pensar cómo puede encajar dentro de la gama de productos existentes y, al mismo tiempo, destacar. Sobre esto no hay ninguna regla escrita: podría ser algo tan sencillo como cambiar un color o la imagen del producto, o algo más complejo. De lo que sí te tienes que asegurar es de mantener las fuentes tipográficas o las pautas de estilo de la marca, si las hay establecidas.
Fijarse en los packagings existentes en el mercado
Independientemente del packaging en el que estés trabajando, necesitarás investigar un poco para ver cómo son los otros productos que ocupan el mismo nicho de mercado. Por ejemplo, imagina que estás trabajando en el packaging de un nuevo detergente líquido para ropa: en ese caso, tendrías que darte una vuelta por el pasillo correspondiente de la tienda para ver cómo es el packaging de las otras marcas. ¿El producto va a entrar dentro del presupuesto de la mayoría o va a ser más bien un producto de lujo? Tu objetivo debe ser el de crear un packaging que destaque de entre todos, pero también está la cuestión de hasta dónde debes llegar. Si todos los demás packagings son minimalistas y blancos, hacer algo completamente opuesto podría suponer un riesgo para el éxito de la marca. Si se aleja demasiado del resto de packagings, necesitarás algún tipo de razón para hacerlo con el fin de no perder clientes potenciales.
Recuerdo cuando escuché una charla que dio el director de la empresa de diseño de un supermercado. Cuando diseñaban cajas de cereales, siempre se fijaban en lo que la marca líder estaba haciendo. Luego cogían elementos de lo que estaba haciendo como punto de partida para su diseño. Por ejemplo, si la marca líder tenía un personaje de dibujos animados en la parte frontal del envase, ellos creaban su propio dibujo animado, y así sucesivamente. Muy a menudo, los productos de la marca líder en realidad están fabricados exactamente por las mismas personas que las marcas blancas: la única diferencia está en el packaging y en el precio o la percepción del valor de la marca.
Buscar inspiración fuera del nicho de mercado
Una vez que hayas echado un vistazo a lo que está haciendo la competencia, echa un vistazo fuera de tu nicho de mercado: lo bueno de esto es que puedes encontrar productos dirigidos a un público similar, pero con un diseño que probablemente será muy diferente. Imagina que has determinado con el cliente los objetivos de un proyecto para crear diseños de packaging para una gama de galletas de lujo. Podrías fijarte en el packaging de helados o vino de categoría superior y ver si te pueden servir de inspiración. Luego puedes escribir el nombre de los productos que te gustan y crear un moodboard o muro de inspiración cuando vuelvas a tu ordenador.
Considera cómo se expondrá
Una cosa importante que hay que tener en cuenta es cómo se va a exponer tu producto. Por ejemplo, si vas a una tienda de bricolaje o ferretería, algunos productos estarán expuestos en cajas promocionales (cajas de cartón tipo expositor con unidades a la venta). Esto significa que puede que lo que haya en la parte inferior del packaging no estará a la vista, por lo que tendrás que asegurarte de que la información importante se muestre cerca de la parte superior. También, es posible que los productos altos se muestren tumbados, por lo que solo se verá el final. En este caso, toda la información importante también debe estar ahí.
¿El packaging tiene una ventanilla o una parte transparente a través de la cual el cliente puede ver el producto que hay dentro? En caso contrario, necesitarás incluir unas buenas fotografías del producto en el packaging para que el cliente pueda ver cómo es el producto y cómo funciona (en el caso de que se trate de un producto que haga alguna función, en lugar de un artículo como comida).
Cómo diseñar tu packaging
Una vez que hayas hecho tu investigación y encontrado algo de inspiración, es el momento de empezar a crear bocetos de las ideas de diseño. Puede que tu cliente ya tenga en mente una caja o etiqueta que quiera que uses, o puede que te hayan pedido que propongas algunas ideas. Si tienes que idear cómo empaquetar el producto real (por ejemplo, la forma de la caja), te puede interesar crear algunas maquetas de cartón para ver cómo queda. Luego ya podrás trabajar en el proceso de diseño como normalmente haces. También tienes que tener en cuenta cómo se va a imprimir tu packaging: puede variar dependiendo del material que vayas a usar.
En las fases iniciales del diseño, no necesitas pensar demasiado en los detalles, pero recuerda que sí que tienes que considerar dejar espacio para elementos esenciales y contenidos legales en tu packaging. La mayoría de los packagings deben mostrar un código de barras y una dirección para devoluciones. Algunos packagings deben mostrar avisos legales y de seguridad, iconos que representan pruebas que han pasado y, en el caso de la comida, un panel con los ingredientes y los valores nutricionales.
Es posible que también tengas que presentar varias propuestas de diseño: yo siempre pienso que tres es un buen número.
Cómo presentar tus diseños de packaging
Hay varias formas de presentar tus diseños.
- Si tienes las cajas, botellas o frascos reales, podrías imprimir tus diseños y colocarlos en el packaging.
- Si tienes una fotografía de la caja, la botella o el frasco, podrías aplicar tus diseños a la fotografía.
- Podrías encontrar o hacer una fotografía de un packaging similar y aplicar tu diseño sobre ella.
- Podrías usar Adobe Dimension, que es un software que te permite crear maquetas de tu producto y escenas en 3D.
- Podrías crear tu packaging visual con software 3D. Yo uso Cheetah 3D, un software 3D barato para Mac.
Por qué deberías dejar la ingeniería del papel a los expertos
Ya he mencionado que, si estás diseñando la forma de la caja, puede que te convenga crear una maqueta. Sin embargo, te recomendaría que, una vez que te hayan aprobado la forma de la caja general, busques a un experto en packaging estructural o un impresor de packaging para crear el diseño de corte de tu envase. Estos profesionales tendrán software creado especialmente para este trabajo y sabrán todo sobre el grosor y las tolerancias de diferentes tipos de cartones y cartulinas. Y no solo eso, sino que también serán capaces de crear una guía de corte que use la menor cantidad de material posible para reducir los costes. Si decides crear la guía de corte por tu cuenta y el diseño de corte de tu producto tiene un error de un milímetro, es posible que las solapas de tu caja no se puedan montar bien.
Espero que estos consejos te ayuden a crear diseños de packaging de éxito que les encanten a tus clientes.