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La digitalización ha traído consigo una sobrecarga informativa debido a la enorme cantidad de información y mensajes que se transmiten a diario a través de los distintos medios. Para hacer frente a la infinidad de estímulos publicitarios, reducimos nuestro nivel de atención: incluso sin saberlo, solo vemos y oímos lo que responde de alguna manera a nuestros gustos e intereses, ignorando el resto.
Gracias a que muchas personas lo consideran un objeto útil, un gadget o artículo promocional es capaz de superar estos filtros cognitivos, favoreciendo la comunicación con el destinatario y la memorización de la marca por parte de este. Además, los artículos promocionales son los únicos mensajes publicitarios capaces de estimular los 5 sentidos y, por tanto, pueden potenciar las emociones y sensaciones individuales.
Al convertirse en un objeto de propiedad a todos los efectos, los regalos más útiles logran introducir la marca en la vida cotidiana de los consumidores, actuando como un anuncio publicitario duradero. Pensemos, por ejemplo, en una taza o en una memoria USB personalizada: ambas pueden integrarse en la rutina diaria, construyendo un vínculo duradero con el público.
Según un estudio realizado en 2021 por PPAI (Promotional Products Association International), al 94 % de los consumidores les gusta recibir productos promocionales y 3 de cada 4 encuestados estarían dispuestos a comprar de una marca de la que no son clientes si recibieran un artículo promocional gratis. Estos datos muestran que los regalos promocionales de empresa son excelentes herramientas de marketing y pueden usarse para dar visibilidad a una marca, establecer una relación con clientes potenciales y fidelizar a los clientes existentes.
Cuándo usar los artículos promocionales
Eventos, convenciones, ferias, reuniones, entregas de premios, campañas promocionales… Muchas son las situaciones en las que se puede regalar un artículo promocional personalizado a clientes potenciales o existentes, empleados y proveedores de una empresa. Estos objetos consiguen atraer la atención del destinatario y crear una experiencia de marca más agradable y memorable. Pensemos, por ejemplo, en una feria, donde los visitantes tienen que lidiar con cientos de estands y expositores diferentes: la distribución de artículos originales y útiles puede despertar su interés, comunicar un mensaje específico y fomentar nuevos contactos.
Las tres características del artículo promocional perfecto
Para no acabar olvidado en el fondo de un cajón, el artículo promocional debe ser, ante todo, un objeto útil y bonito. En segundo lugar, es importante que sea coherente con la identidad y el negocio principal de la empresa para mejorar su reputación y facilitar el reconocimiento de la marca. Finalmente, si el objetivo es captar nuevos clientes potenciales o fidelizar a los ya existentes, es recomendable incluir la distribución de artículos personalizados dentro de una estrategia de marketing más amplia con el fin de transmitir un mensaje más fuerte y aumentar las posibilidades de éxito de la iniciativa.
El neurogadget
La agencia italiana Sercom ha acuñado el término neurogadget para definir un artículo personalizado capaz de aprovechar la dimensión emocional de los clientes existentes y potenciales.
Gracias a la aplicación de los principios del neuromarketing al marketing promocional, la nueva generación de gadgets o artículos promocionales es fácilmente identificable con la marca y permite crear un vínculo más sólido y profundo con el público, despertando en él emociones positivas. Cada neurogadget se desarrolla ad hoc en función del público objetivo, la empresa y el mensaje a transmitir; puede ser un simple bolígrafo o un artículo más sofisticado, dependiendo de los objetivos a alcanzar y el tipo de clientela. A diferencia del producto promocional estándar, el neurogadget es capaz de conectar con el destinatario, estableciendo una relación cercana y fomentando así la fidelización.
Ejemplos de éxito
Concluimos este artículo con algunos ejemplos de artículos promocionales originales que encajan a la perfección con las características del público de referencia. Al diseñar calcetines «inteligentes» equipados con sensores que pueden pausar el programa si el espectador se queda dormido, la plataforma de streaming Netflix ha demostrado que conoce muy bien a sus clientes.
Budweiser también ha logrado aprovechar las pasiones de sus clientes con estos productos especiales distribuidos durante el partido de hockey de los Washington Capitals contra los Toronto Maple Leafs. Al sincronizarse con el teléfono móvil de la persona, el vaso se iluminaba cada vez que su equipo favorito conseguía un punto. La iniciativa ha ganado suficiente exposición en las plataformas sociales para convencer a otros equipos de hockey de crear su propio vaso personalizado.
Si el primer ejemplo nos enseña que cualquier objeto, incluso el más banal, puede transformarse en un artículo promocional corporativo fuera de lo común y perfectamente acorde con las necesidades del público, el caso de Budweiser demuestra que los artículos personalizados pueden convertirse en auténticas piezas de colección. El reto de cada marca está en combinar un análisis preciso del público objetivo de referencia con una pizca de creatividad para ofrecer un artículo promocional útil y original.